Muchas personas cuando tienen un dolor muscular, en los huesos o en las articulaciones se plantean la posibilidad de ir al traumatólogo pero, ¿Cómo lo elegimos? ¿Sabrías decir cuál es el mejor? ¿Sabrías decir cuál es el mejor traumatólogo de Granada?
Muchas veces el factor que se elige para valorar si algo es bueno o malo es el precio que nos cuesta. Puede ser un primer factor pero si el médico está en la sanidad pública no nos cuesta nada. Entonces, ¿cómo se si el traumatólogo es bueno? Para ello, vamos a ver una serie de consejos a la hora de elegir a que especialista acudimos.
Lo primero que debemos saber es que los traumatólogos suelen especializarse por articulaciones o en un parte del cuerpo. En muy contadas excepciones hay traumatólogos que traten hombros, manos, pies y rodilla a la vez. Esto se debe a que uno de los factores más importante para llegar a la excelencia, es la práctica. Realizar muchos operaciones en una articulación, hace que se desarrolle la habilidad y cada vez se haga mejor.
Otra cosa a tener en cuenta es que cada articulación o parte del cuerpo es lo suficientemente compleja para no poder dominar más de 2 o 3 como máximo. Además los avances médicos en los tratamientos son continuos y para poder estar al día requiere tiempo por parte del especialista para poder mantener una formación continua a lo largo de toda su carrera.
A continuación pasamos a ver un listado de factores a tener en cuenta:
- Reputación. Lo primero que se debe hacer es realizar una búsqueda general e investigar los comentarios de otros pacientes que hayan dejado en Internet. Nos servirá para saber la experiencia de otras personas. También podemos preguntar a nuestro entorno cercano sobre su experiencia.
- Referencias. Aunque un médico es un médico, no todos tienen el mismo nivel y todo parte de donde se ha formado. Por tanto, es recomendable investigar, por ejemplo, a qué universidad fue, dónde hizo su residencia o cuántos años de experiencia tiene.
- Disponibilidad. Muchas veces se piensa que un buen médico es el más popular y hace falta reservar una cita 6 meses antes. Pero si siempre está tan ocupado, ¿cómo va a conseguir una cita cuando realmente lo necesite? Muchas veces es mejor contar con la atención de un traumatólogo que tenga tiempo a otro que no tenga tiempo para hacer un seguimiento al paciente.
- Localización. En ocasiones los traumatólogos de nuestra ciudad no son de nuestra confianza o simplemente no son especialistas en nuestra lesión. Por suerte, la mejora en los medios de transporte y en la comunicación ha puesto al alcance un mayor número de médicos a los que acudir.
- Relación uno a uno. Se trata de una profesión de cara al público, y que además, requiere en ocasiones de decir cosas complejas de manera sencilla y de tomar decisiones delicadas. Para ello tiene que existir una relación de confianza total y de respeto.
- Opciones de pago. Si nos decidimos por acudir a un médico privado, y no disponemos de un seguro médico, tendremos que valorar cuánto nos costará y si tiene facilidades a la hora de pagar.
Estos son los factores más importantes a la hora de elegir a un traumatólogo. Podemos añadir más pero si seguimos esta lista nos aseguraremos encontrar a un especialista de prestigio, y nos aseguraremos no estar dejando nuestra salud en manos de un absoluto desconocido.