La actividad física, así como el mundo del deporte, están muy ligados a la fisioterapia, tanto a nivel preventivo como curativo. Por ello, es muy importante saber las claves para poder encontrar un buen fisioterapeuta en Málaga. Para tenerlo más claro, hablaremos de cuatro puntos importantes que destacar en un buen fisioterapeuta.
Por supuesto, un buen profesional sanitario debe tener un gran número de cualidades, pero vamos a hablar de solo cuatro son las que nunca deben faltar, las que deben estar presentes en toda sesión de tratamiento fisioterápico. Los cuatros puntos son:
Realizar una buena valoración. Llegar con molestia, tumbarte, desconectar el cerebro y que te den un masaje está muy bien, pero si tienes un problema que puede ser tratado mediante la fisioterapia, lo fundamental es invertir tiempo de cada sesión en una buena evaluación. El fisioterapeuta se beneficiará de conocer el diagnóstico médico, pero, no nos engañemos: esto muchas veces da poca información sobre las mejores pautas de tratamiento.
A esto hay que sumarle exploración física, pruebas de valoración y un largo etcétera que lleva a muchas personas a desesperarse “¿Pero cuándo me va a dar el masaje que me cure?” piensan muchos.
Una buena valoración consigue detectar las alteraciones y buscar las mejores técnicas para solucionar los problemas. Por ello una buena valoración (y reevaluación cada cierto tiempo) permite reducir la duración del tratamiento, consiguiendo actuar de forma óptima sobre el problema con las técnicas adecuadas. Un buen fisioterapeuta pasará bastante tiempo de la sesión (sobre todo en la primera visita) valorando tu situación y buscando las mejores soluciones. Dale tiempo.
Tratamiento activo. El tratamiento pasivo es importante, y está indicado para tratar y mejorar muchas enfermedades y lesiones. Por tratamiento pasivo: masaje, movilizaciones, estiramientos, técnicas de electroterapia, termoterapia, etc.
Sin embargo, en todas las patologías susceptibles de tratamiento fisioterapéutico, el tratamiento activo es una parte fundamental de la terapia, dentro y fuera de consulta, es decir, en el hogar. Por tratamiento activo entendemos principalmente ejercicios, movilizaciones, correcciones posturales, estiramientos dinámicos y demás que el fisioterapeuta enseña para que el paciente ejecute.
Hay quien va a fisioterapia para que le den masaje, le pongan unas “máquinas” o “corrientes”, un poco de calor, unas cintas de colores y para casa. A ver, como digo, el tratamiento pasivo puede estar indicado, pero se queda incompleto si no se indica un tratamiento activo para mantener y mejorar lo conseguido en la sesión de tratamiento.
Consejos para casa. La fisioterapia tiene que ofrecer libertad. Para que una persona se recupere de una lesión, sobre todo si es deportiva, es necesario una serie de pautas, consejos, cambio de hábitos, realización de ejercicios y demás pautas que se apliquen para reducir la probabilidad de recaer en la lesión, y también de sufrir otras lesiones.
Por lo tanto, una buena recuperación necesita complementar el trabajo pasivo y activo con una serie de consejos para tratar de prevenir otros problemas que pueda sufrir la persona como consecuencia de su actividad, ya sea cotidiana o deportiva.
Derivación a otros especialistas de la salud. Puede que haya una única lesión, pero que necesite de la acción coordinada de distintos profesionales para obtener el mejor tratamiento. Por eso se dice que el tratamiento de las lesiones requiere de un equipo multidisciplinar.
Un buen fisioterapeuta conoce sus límites, y no tiene problema en derivar a compañeros más preparados para tratar un tema concreto. Derivar no significa demostrar ignorancia, sino conocer los mejores recursos para solucionar el problema de tu paciente.
Un buen profesional tampoco tiene miedo a derivar a otros profesionales sanitarios, ya sean médicos, podólogos, etc. o también profesionales no sanitarios, como un entrenador personal o profesional de la actividad física para que la persona complete su recuperación, una vez que ya está sano pero necesita unos requisitos de entrenamiento específicos que debe dar un profesional.