¿Y qué consejos puedo seguir si voy a afrontar mi primera ‘guerra’ de paintball? Aquí os dejamos cinco pautas que no debes olvidar cuándo agarres tu pistola y entres al campo de batalla.
El paintball es un juego de equipo: No seas individualista, ni pasota ni egoísta. Perderás pronto y harás que tu equipo sea más débil. La comunicación y el trabajo en equipo son esenciales en este juego. Si no será mejor que juegues tu solo a algún videojuego.
Tu propia organización: Es inteligente anticiparse a los demás: Estar más pendiente de los detalles será clave si quieres ayudar a tu equipo a conseguir la victoria. Examina el terreno y ten ya en tu cabeza una buena planificación de forma anticipada. Es importante que comprobemos que la pistola funciona correctamente y, por ejemplo, que no se atasca. De igual forma, debemos comprobar que la máscara está limpia y no se empaña o que no nos quedamos sin munición.
Es un juego físico, de movimiento: No te quedes quiero, corre, se dinámico. Si te ven, será difícil darte y serás tú, gracias a tu movimiento constante, quién tenga el factor sorpresa. El paintball es un juego físico: corre, suda y muévete mucho. Y si eres ágil y rápido como el viento, pues mucho mejor.
Una buena estrategia marcará la diferencia:
Debéis tener en cuenta y subrayar en vuestra memoria la palabra estrategia, la más importante del paintball. El instrumento para ganar. La debe establecer todo el equipo de forma conjunta, o si el grupo lo prefiere nombrar un capitán que coordine la estrategia. Os dejamos algunas pistas: buscad puntos elevados del terreno, equilibra ataque y defensa, busca superioridades numéricas contra el adversario en zonas ventajosas para tu equipo…etc. El resto lo deberás pensar tú, ya que hay muchas estrategias y muchas pueden ser válidas. Saca el máximo provecho de ti mismo y de tu equipo gracias a una buena planificación en este noble juego, el del paintball. Y recuerda, no es una guerra. Es un juego. Un juego de estrategia.